Columna de análisis crítico

lunes, 14 de diciembre de 2009

Centralismo y endeudamiento

Los gobiernos centralistas siempre buscan ejercer el monopolio presupuestal, bajo la base, indudable, de que el manejo de los recursos públicos significa la posibilidad real de ejercer el poder.
Al contrario, los gobiernos federalistas, esto es, sustentados en una distribución de competencias hacia las entidades y municipios, buscan liberar recursos para un ejercicio plural y democrático, en busca de una mayor permeabilidad presupuestal.
Los estados navegan muchas veces bajo la bandera federalista, pero se comportan como administraciones centralistas.
Tal es el caso del sistema mexicano.
Para Chihuahua, en el presupuesto 2010, hay una baja sensible de participaciones federales, lo cual provocó una reducción del uno por ciento en el gasto público del año próximo.
No es el único caso a nivel nacional. Otras entidades sufren los estragos de la crisis económica provocados por el contexto internacional, por un lado, y por el otro, por las decisiones inadecuadas del pasado inmediato que derrocharon los ingresos petroleros en forma inexplicable.
Ante esta situación, las entidades federativas deben hacer esfuerzos de administración, para sostener las políticas de obra pública y los beneficios sociales a la población, así como acentuar las acciones en materia de seguridad.
Dos son los mecanismos que tienen las entidades federativas como chihuahua para hacer frente a la situación, el crédito y los impuestos.
Una política sana, pero además de compromiso social, privilegia el empréstito por encima del alza en contribuciones, las cuales deben moverse en forma prudente. Debe existir un equilibrio en la aplicación de ambos mecanismos.
Un crédito blando, manejable, razonable, parece una buena medida para impulsar la obra pública. Esta deberá ser una de las bases que el congreso del estado de chihuahua deberá atender al discutir la propuesta de deuda por dos mil quinientos millones de pesos solicitada por la administración estatal, el otro, por supuesto, su destino, en busca del mayor crecimiento y beneficio social de los habitantes.