Columna de análisis crítico

domingo, 12 de enero de 2014

El escándalo Hollande

El Presidente Francés Francois Hollande piensa que tiene derecho a la protección de su vida privada y por tal motivo, analiza demandar a un periódico sensacionalista que publicó la noticia de su amorío con una famosa actriz. La mayoría de los franceses piensa igual que el mandatario: que nadie tiene derecho a entrometerse con las cuestiones íntimas de un ciudadano aún y cuando se trate del Presidente de la República. Incluso, el principal partido opositor, en voz de sus líderes, piensa que el asunto solo adquiere relevancia si se demuestra que existe un detrimento en las finanzas públicas, es decir, que se haya favorecido a la supuesta amante con recursos del erario, antes, se trata de un asunto personalísimo. Es de llamar la atención el criterio francés ante el denominado interés público de la información, y la minusvalia del principio de privacidad cuando se trata de asuntos concernientes a un líder de opinión pública como es el caso del Presidente. En México el criterio ya ha sido definido y reiterado por la Corte en diversas resolutorias: tratándose de funcionarios públicos, la información publicada en relación con los mismos tiene una menor protección a la vida privada, que cuando se trata de ciudadanos comunes. Esto es así porque la prensa juega un papel clave de contrapeso tratándose de asuntos de interés público, situación en la cual se ve inmersa la información -que aún siendo personal- de cualquier índole relativa a los servidores públicos o líderes de opinión -permanentes o coyunturales-. El criterio sostiene que la información adquiere tintes de interés público en función de la relevancia del papel social del protagonista, quien debe soportar una mayor invasión a su vida privada. Claro, la información debe cubrir ciertos requisitos: el interés público, que en el contexto resulte relevante, sin importar si esta fundada o no, ya que esto último, en dado caso, representa un aspecto que mediante el derecho de réplica puede ser combatido. Aún más, pretender que sólo se publique información que haya sido verificada, supondría una previa censura, que en el ámbito nacional e internacional ha sido prohibida, por suponer una restricción a la libre expresión de las ideas. El pueblo francés deberá avanzar hacia un mayor reconocimiento de la necesidad de la invasión a la intimidad que realiza la prensa tratándose de altos funcionarios de gobierno, desde el punto de vista de que carecen de la misma protección a la vida privada que los ciudadanos comunes. Hollande deberá reflexionar en su actuar frente a la publicación. Por lo pronto ya se equivocó: en lugar de desmentir la información, se limitó a acusar al rotativo de violentar su derecho a la intimidad, y amenazar con demandar para obtener un resarcimiento. El Presidente debió ser contundente y negar. No lo hizo, suponemos, porque existe veracidad en la información, que por cierto esta soportada con imágenes. El presidente debe comprender que no se trata de la relación íntima extra marital de cualquier ciudadano. Se trata de la máxima autoridad del gobierno francés, sobre quien recae una alta responsabilidad en todos los ámbitos, seguridad, economía, relaciones internacionales, etcétera. Se trata de un alto funcionario, de una nación relevante en el contexto europeo y mundial. Por supuesto que las noticias en relación con él resultan de gran relevancia e importancia para la opinión pública no sólo francesa, sino mundial. Por ello, la noticia acerca de su relación extra matrimonial, que se había difundido por las redes sociales, y que apenas la semana pasada fue abordada por un diario impreso, acapara las primeras planas de los periódicos y noticiarios en el mundo. Es una noticia relevante que debió ser combatida de una manera más adecuada y no bajo la simpleza de la amenaza de demandas. La situación acerca de la existencia de uso de recursos públicos en favor de la supuesta amante, es un asunto secundario, que podría derivar en sanciones de otra naturaleza a la mediática y política. Por lo pronto, Francois Hollande tiene que enfrentar la crisis, similar a la que enfrenta el Rey Juan Carlos, acusado mediaticamente del mismo mal. Deberá hacerlo estoicamente: la salida es desmentir...o demandar. Al final, la opinión pública se fortalece, aún y cuando nos guste o no que se ventilen asuntos del corazón de los gobernantes: ellos deben estar conscientes de que su alta posición gubernamental los expone en vitrina a un mayor escrutinio público. EN EL TABLERO...Un juez de distrito consideró que la instalación de la Junta Local de Conciliación en Cuauhtémoc es un acto consumado y por tal motivo negó la suspensión provisional a las empresas que presentaron amparo...Ahora deberán esperar a la resolución definitiva para saber si se les concede la razón en el sentido de que la oficina resolutoria de conflictos laborales constituye un gasto innecesario que no se justifica...Se estima que el juzgado habrá de sobreseer el juicio y confirmar la decisión de la autoridad de acercar el tribunal laboral en beneficio de los trabajadores demandantes...La convocatoria para la renovación del Comité Directivo Estatal del PAN está por emitirse...Igual que en el Nacional, a nivel estatal se esta pidiendo que el dirigente se separe del cargo antes de optar por la re-elección, para estar en igualdad de condiciones con el resto de los aspirantes, lo cual se estima muy improbable....Madero igual que Vazquez no renunciaran a una posición de ventaja frente a sus competidores....