Columna de análisis crítico

lunes, 30 de diciembre de 2013

La encrucijada Rusa

Rusia no acaba de asimilar el acto terrorista que en Octubre pasado cobró siete muertos y 55 heridos y el domingo 29 de diciembre, enfrenta dos nuevos ataques: uno a la entrada al metro y otro en un trolebús, con un saldo terrible de decenas de personas fallecidas, todos en Volgogrado, antiguo Stalingrado. El Estado Ruso ha sido incapaz de prevenir los actos terroristas: se ha limitado a encarcelar a personas que se manifiestan en contra de la ausencia de libertad de expresión y el cambio climático: por cierto, recién habían sido liberadas las personas que ya habían sido sentenciadas a varios años de prisión por sus acciones de manifestación de protesta, entre ellas una integrante de un grupo Punk y activistas de Green Peace. Es cierto: deben condenarse las acciones auténticamente terroristas, como los actos perpetrados contra personas en octubre y diciembre: no podemos justificar la muerte de inocentes como mecanismo de presión para obligar a modificaciones de régimen, como esta ocurriendo en la ex Unión Soviética. Podrá señalarse la cerrazón de Vladimir Putin, así como la ausencia de capacidad política para enfrentar los retos de gobernabilidad que le plantea la nueva Rusia: sin embargo, esto no resulta suficiente para justificar la barbarie de un acto terrorista que le quita la vida a decenas de personas. El uso de las armas resulta un juego perverso, por que bajo la legitimidad del uso de la fuerza para modificar un gobierno totalitario y corruptor, se pretende justificar la muerte de personas que directamente son ajenas a los procesos políticos: estas personas resultan inocentes, víctimas de una lucha de poder. Pero además subyacen pretensiones de retroceso de antiguos intereses del régimen totalitario: estos procesos los estamos viendo con mucha claridad en Egipto, con el retorno de la milicia al poder después del derrocamiento del gobierno electo democráticamente. Hay un derecho a oponerse a los regímenes que resultan contrarios a los intereses de los países. La misma Constitución Mexicana lo hace: legitima al pueblo para cambiar y oponerse a un régimen dictatorial, bajo el uso de las armas: es el derecho a la Revolución, que nuestro país ya ha ejercido al menos en dos grandes gestas: la Independencia y la Revolución: pero no se trato de actos terroristas, como los que hemos sido testigos en Rusia. El proceso político de Rusia es verdaderamente complejo. No ha sido fácil para un gobierno autárquico aceptar modificaciones al régimen, que de entrada implican la perdida de la soberanía como país en el ex territorio soviético, con la autonomía alcanzada por los antiguos territorios hoy autónomos e independientes: pero además aceptar el glasnot y la perestroyka planteada por Gorbachov hace varios lustros, representa un auténtico drama democratizarse. Sin embargo, esto no justifica los excesos cometidos por un gobierno que cierra las puertas de la expresión y sanciona penalmente, con cárcel, conductas, que en naciones democráticas ameritan falta administrativa, 36 horas de arresto, y que en aquella nación implican cárcel por meses o años: Rusia tiene que avanzar en modificar su codificación penal para flexibilizar sus sanciones. La encrucijada Rusa es ceder a las acciones terroristas, porque ello significa justificarlas: por eso el gobierno asumirá una posición de mayor cerrazón y autoritarismo, con el miedo de perder gobernabilidad: una solución de esta naturaleza perpetuará las deficiencias en detrimento de la democracia, particularmente la tolerancia. Circulo vicioso que deberá romperse tarde que temprano. EN EL TABLERO...Las obras de edificación de las vialidades para la circulación del ViveJuárez tienen un retraso del 70 por ciento...La administración municipal analiza sanciones para la empresa constructora, aunque el problema de fondo es el flujo de recursos, hay serias deficiencias, en un gran proyecto que vale dos mil quinientos millones de pesos, y que representa el primer proyecto de inversión pública a largo plazo, que esta fracasando por un inadecuado seguimiento...Toma posesión Sergio Alvarez como alcalde de Coyame, tras unas históricas elecciones empatadas y su posterior triunfo en extraordinarias celebradas a mediados de noviembre...La clase política se trasladará a la tierra del sotol...